
Las genéticas no son originales, son cruzas con un ruderalis o entre sí.
Las dos principales genéticas de marihuana son Indica y Sativa, y se diferencian principalmente en su estructura, efectos y aroma. Aquí hay algunas diferencias clave entre las dos:
También hay diferencias en la tasa de crecimiento, la producción de resina, la cantidad de THC y CBD, y la resistencia a enfermedades y plagas entre las dos genéticas.
Es importante tener en cuenta que, aunque las cepas de marihuana se clasifican comúnmente como Indica o Sativa, la genética de la planta puede variar significativamente incluso dentro de una misma clasificación. Además, hay muchas cepas híbridas que combinan ambas genéticas para crear perfiles de efectos y sabores únicos.